EL TAROT: LAS SEMILLAS DEL FUTURO.
Como sabemos el tiempo no existe, es un artificio que hemos construido los humanos porque necesitamos medir los acontecimientos de nuestra vida , es como una cuarta dimensión que añadimos a las existentes largo-ancho-alto para enmarcar lo que nos acontece, nuestra historia vital y social cobre mayor o mejor sentido, más definido o más delimitado, es algo que a los humanos nos resulta útil o nos entretiene, pero en sí, no es real.
Si el tiempo, objetivamente, no existe, el futuro, como es obvio tampoco; entonces, ¿qué hacemos montones y montones de brujitas y brujitos prediciendo el futuro? ¿Tiene sentido? ¿somos realmente unos cuentistas que se inventan las cosas que les decimos a nuestros consultantes ( y, además, cobramos caro)? ¿Estoy diciendo que el Tarot es un timo?
Nada más lejos de la realidad, el Tarot no es un timo; el Tarot contiene las semillas del futuro, y nos informa de acontecimientos correlativos e interdependientes, es decir un suceso se dará cuando se cumpla tal otro, y hay posibilidades de que el primero ocurra o no, esta información sí está disponible y tenemos acceso a ella.
El Tarot es un valioso sistema para obtener información, nos informa de las energías de las situaciones tanto en pasado como en presente y futuro, tanto de las nuestras como de las personas implicadas en la situación por la que se consulta. Pero es muy importante tener en cuenta esta información e intentar corregir las posturas que no estén bien orientadas
. Dicen que dar consejos es gratis porque casi nadie los escucha o los pone en práctica, y no es porque despreciemos a quien nos da el consejo, sea bruja, brujo, amiga, amigo o el vecino del quinto, y esto porque tenemos una tendencia enorme a seguir haciendo las cosas como las hacemos habitualmente, por inercia, dejándonos llevar y reflexionando lo menos posible.
Uno de los valores añadidos de una consulta al Tarot es precisamente el que nos haga reflexionar. Existe la tendencia a esperar sólo que nos digan qué va a ocurrir, pero esta forma de enfocar la consulta es incorrecta por el motivo anteriormente mencionado, y porque de forma implícita presupone que el Tarot sentencia, que sus respuestas son inamovibles, y esto en modo alguno es así. Por eso hay tantas cosas que NO se cumplen, y lo pongo en mayúsculas porque sé que es así, especialmente cuando la respuesta que buscamos es la de la pregunta ¿cuándo va a suceder tal cosa?. Yo ya hace tiempo empecé a pedir que no se me consultase directamente por el tiempo, por la sencilla razón de que el tiempo cuando necesitamos saberlo nos lo dicen, sale en la tirada, pero cuando vamos en su busca y forzamos la tirada, lo más seguro es que la respuesta sea incorrecta.
Debemos realizar la consulta al Tarot de forma abierta y humilde, con intención de aceptar las respuestas que nos lleguen (porque esa es otra cuestión sobre la que hablar largo y tendido, cuando no queremos aceptar la información que recibimos y nos empeñamos en decir que el-la tarotista es malo y buscamos una segunda opinión), pero esto como digo dará para otro escrito.
Es con esta actitud como una consulta al Tarot nos va a resultar útil; si nos informan de tiempos, bien esperemos que se cumpla en un plazo aproximado, si no nos informan, bien también. Las cosas siempre suceden cuando deben suceder. Y sobre todo tener siempre en cuenta que nuestro libre albedrío, que no es otra cosa que nuestra facultad de elegir entre A y B, normalmente entre opciones opuestas está siempre operativo; cuando nos informan de que algo “va para largo” tenemos la opción de esperarlo o tomar otro camino. Pero la decisión siempre será nuestra, y la podemos tomar, claro está con ayuda del Tarot, pero asumiendo siempre nuestra responsabilidad con respecto a la situación. Buscar la opción de tomar el camino del medio y pretender forzar las cosas no funciona.
