Para los que no hayan tenido un contacto efectivo y profundo con la astrología, puede parecerles un tanto insólito establecer un vínculo entre esta y la terapia floral de Bach. Sabemos que las flores de Bach son una ayuda para impulsar nuestra personalidad hasta el punto de reconducirla hacia los auténticos dictados del alma y superar los desequilibrios, miedos y bloqueos que nos impiden ser felices con nosotros mismos. Pero hay una gran barrera para su uso, que es establecer un diagnóstico correcto, ser sinceros con el terapeuta y nosotros mismos y descubrir los puntos débiles de nuestra personalidad y elegir sobre cuáles actuar. Es en este punto donde han entrado varios sistemas paralelos para ayudar al terapeuta floral a facilitar la elección de las esencias más apropiadas para cada caso a tratar. Por ejemplo? la kinesiología.
>>>¿Qué arquetipo numerológico somos?
La astrología como instrumento para las flores de Bach
Y aquí se revela la fuerza de la astrología. A través de su principal herramienta, la carta astral, la astrología puede representar un enorme apoyo a la hora de determinar aquellos aspectos sobre los que debemos incidir y con qué flores hacerlo. De esta forma, la carta se convierte en una herramienta capaz de analizar con todo detalle nuestra personalidad. Bach se refiere en su obra a la astrología a la hora de utilizar la posición natal de la luna para determinar nuestra tipología, el objetivo y finalidad de la vida, además del remedio que apoyará dicho objetivo. No obstante, reducir la aportación astrológica a la posición de la luna es quedarnos con una mínima expresión de las muchas posibilidades de desarrollo astrológico. Es mucho lo que la astrología puede aportar a la terapia floral, de la misma forma que también lo es lo que las flores pueden aportar a la astrología.
>>>Carta astral y el signo solar
¿Cómo los astros ayudan a la terepia?
En la astrología, la carta astral o el horóscopo es el estudio de la composición energética del ser humano, y la terapia floral de Bach apunta al equilibrio energético entre el cuerpo espiritual y el cuerpo físico. En ambos sistemas se establecen distintos grupos cuyos integrantes comparten signos distintivos y rasgos precisos de carácter, personalidad y temperamento, y también que todas las personas se adscriben a un grupo determinado.
Diversos autores han estudiado los arquetipos florales de Bach para establecer su correspondencia con los diversos arquetipos y configuraciones astrológicas, y está más allá de esta breve introducción ofrecer un informe detallado de todos ellos. Baste mencionar que en el sistema de Bach existen treinta y ocho remedios, aunque la relación original era solo de doce, descubiertos entre 1928 y 1932. Este trabajo primero de Bach se basaba en que la humanidad se compone de doce grupos o tipos perfectamente definidos, y cada persona pertenece a uno de esos grupos cuyos integrantes comparten signos distintivos y rasgos de carácter, personalidad y temperamento, que pueden tratarse específicamente con una esencia curadora para cada uno de ellos. Estos doce curadores se corresponden con doce estados de ánimo y también con los doce signos del zodíaco.
>>>El Tarot y las Flores de Bach
12 remedios de la terapia floral para los signos zodiacales
El astrólogo Peter Damian estudió las características de los doce signos astrológicos que se asemejan a los doce remedios originales de Bach relacionados con el carácter. Realizó esta relación entre signos y su flor de Bach correspondiente.
Esta relación puede ser un primer paso para establecer una vía de terapia en los casos de duda o dificultad de diagnóstico, aunque en ningún caso una guía inamovible. La mejor opción es elaborar la carta astral con la fecha, hora y localización del nacimiento para obtener, mediante la posición de los astros en ese momento, la mejor aproximación a la flor de Bach personal.